Gráfico 21
Actividades a las que se dedican los Habitantes de Calle en Bogotá D.C
Fuente: DANE, IDIPRON. IV Censo sectorial habitantes de calle, Bogotá - Soacha.
Cálculos: Subdirección de Planeación – DABS, 2006.
Gráfico 22
Actividades a las que se dedican los Habitantes de Calle en Bogotá D.C., por sexo
Fuente: DANE, IDIPRON. IV Censo sectorial habitantes de calle, Bogotá - Soacha.
Cálculos: Subdirección de Planeación – DABS, 2006
De acuerdo a lo anterior, el comportamiento visto desde cada uno de los grupos etareos permite establecer que aunque predominan como principales actividades el reciclaje y el “retaque”, le siguen en orden de importancia las siguientes acciones: los niños y niñas de 0 a 7 años, se dedican principalmente a otras actividades; de 12 a 35 años, a “trabajar”; desde los 36 años en adelante, los habitantes de calle realizan ventas callejeras. Aunque las actividades a las que se dedican los habitantes de calle son informales, relacionadas directamente con el rebusque, la sobrevivencia y la dinámica socio-económica de la ciudad, el análisis por rango de edad, permite dimensionar la precariedad y el riesgo en el que se encuentran los jóvenes de 12 a 26 años. Aunque prevalece como principal actividad el reciclaje, según nivel educativo, siguen en orden las siguientes actividades: a reciclar se dedican principalmente las personas que tienen 5 años de educación, a retacar las que tienen 0 años de educación, a trabajar, vender, realizar otras actividades y limpiar vidrios en la calle las que tienen 5 años de educación, a ser zorreros las que tienen 3 años de educación, a tocar llantas las que tienen 4 años y a tocar y hacer malabares en los semáforos las que tienen 6 años de educación.
En la vida se sufre y se es feliz si se quiere y se siguen códigos que los exige la sociedad, pero esto no lo tenía calculado Jorge Iván; pues una de las cosas más duras que ha tenido que sufrir es el desprecio de su familia. Ya que debido a los actos no tan puros que ha cometido con su propia sangre como: robos, engaño, mentiras etc. Es increíble decirlo pero se han marchado de la ciudad para nunca verlo, puesto que se han cansado de la misma situación y problemas que con el tenían. Con que ayuda y con qué fuerzas para salir de su estado de “habitante de la calle marginado” si no tiene lo que más quiso en su vida? Los amigos que muchas veces compartió con ellos lugares mucho mas amenos y limpios en los cuales hoy habita: disfrutó, río, y encontró un espacio en quien confiar, hoy lo miran con lastima y aunque él los ignora, por simple pena de que lo vean en el estado precario en el que se encuentra. Muchas son las oportunidades que ha tenido por parte de sus amigos y familiares. Oportunidades que como él lo aclara “seguirán siendo en vano”, pues no cuenta con un suficiente valor para salir de su segunda vida.
Al ver las cosas de este modo es como dar un ejemplo de lo que llamamos despecho son varias las acciones que las personas toman, unos buscan ayuda psicológica, unos olvidan la situación sin mucha repercusión en sus vidas, pero otros, y la más peor se apoyan en las dependencias psicoactivas, ya sea de alcohol, o fármacos. Pues en esta palabra se encuentra sumergido Jorge Iván, se encuentra despechado, entusado, por su tan maravillosa familia, y con lo único que puede subsanar la amargura de no tenerlas es el vicio. El bazuco”mi pipita” como así lo expresa, el que hasta su sentido de pertenencia consigo mismo lo ha perdió del todo, y sabiendo que ha remplazado netamente a su familia por el vicio afirma al decir que se siente solo y desarraigado, pues hasta en las más puras y frescas noches durmiendo en la calle precisamente en el andén de un asadero de pollos ubicado en el barrio la granada de la ciudad de armenia. Siente miedos “me encuentro solo, quedado en este vicio con muchas ansiedades de robar. Y pidiéndole a mi dios que me brinde la oportunidad pero igualmente no hago nada para sí mismo, no tengo fuerza de voluntad hacia mí, me siento quedado” – son palabras de Jorge Iván mientras miraba un punto fijo en mi cadenilla de oro… que estaría pensando hacer?
Como bien se sabe Jorge Iván quien entre semana se hace un producido de más de $ 140.000 pesos, pero sin antes haber andado por todas las calles de esta hermosa ciudad, tan contaminada visualmente por personas como estas, su labor diaria reciclar, lo que en la noche o en el transcurso del día puede ser su “festiadicción” a él bazuco, sustancia la cual consume a diario una tras otra y con mayor frecuencia, dice no estar en otros vicios, “ni el sacol, ni la marihuana, ni la heroína, solo me gusta el bazuco”. Cuando la semana está por terminar siempre intenta hacerse un ahorro dentro del mismo producido, pero le es imposible, pues cuando llega el día domingo se ve en la penosa situación y sentir que su cuerpo le pide que robe. Esas ansias de robar pero no sin antes abordar a cualquier sujeto y pedirle que le colabore con una moneda pues en todo el día no ha comido nada, y el vicio? Ese sin duda es el día que menos bazucó consume. Se podrán imaginar las ganas infernales de hacerle el mal a otro por tan solo conseguir un pase de bazucó? Ha tenido que soportar mucho sufrimiento a manos de extraños de la calle por su mismo comportamiento de ladrón, es por esto que sin duda el día domingo para Jorge Iván es el más duro de la semana, ya que a cada minuto tiene malos entendidos con muchas personas de la calle. No sin contar las innumerable palizas que ha tenido que soportar a manos de extraños que se ensañan con él, dejándolo tan mal herido, y repudiando cada vez más el comportamiento de las personas.
Para Jorge Iván su situación de habitante de la calle suele ser muy crítica pues todos los días se encuentra con nuevos cosas, pero quisiera el que fuesen buenos momentos, aunque para él los buenos momentos es sentirse totalmente satisfecho al consumir bazuco, todas estas etapas lo han llevado a pensar que su vida es un total desastre llegando al punto de posibles suicidios, esto para él sería la mejor opción dejarlo todo y dejar de sentirse un estorbo para la sociedad, pero a su vez piensa en que esa no es la salida correcta, puesto que, su familia de posición económicamente estable y sin duda un núcleo familiar razonable, unido, trabajador y de buenas decisiones; todo esto lo heredo de ellos; pero, a Jorge Iván algo le falló en su proceso de vida y satisfacción social. Para esta persona que como pobre lo tuvo todo: juguetes, ropa, alimentación, gustos por lo que él quisiera, su familia que fue siempre un apoyo incondicional, y por ultimo hasta posibilidades de haber iniciado estudios en el exterior, propiamente a estados unidos; ya que, cualquier vinculo familiar que el tuviese quería ayudarlo a travesar esta grave crisis existencial. Para la humanidad y en la colectividad existen fuertes argumentos sobre la discriminación social, conociendo este término como el trato de inferioridad a una persona o colectividad por motivos raciales, religiosos, sociales, políticos, económicos, culturales, biopsicologicos, de edad entre otros. Entonces, si esto es así para una persona que se encuentra dentro de una comunidad vista por los demás como respetable y de libre modo de convivir y pensar como las demás instituciones sociales. Como es el trato y gran afano de discriminación social para un habitante de la calle? que, en síntesis es una persona como cualquier otra y tiene derechos? .Pues bien es así como se siente Jorge Iván como un cero en el mundo, según Jorge Iván a la pregunta ¿Cómo siente que lo ven las personas? “como un ladrón, como lo peor, todo el mundo quiere ser el papá de uno, en la calle todo el mundo lo quiere discriminar hacen lo que quieran con uno, lo cogen de carrito, vaya tráigame esto que esto que lo otro, o lárguese de acá, imagínese que en la calle uno está en el andén y todo eso y disque quítese de acá donde es espacio público home” .Es muy tiste saber que ni en los andenes de las calles puede estar gozando de su calma ocasional; dado que, su aspecto malévolo, sucio y no muy confiable le hacen creer a los trabajadores ambulantes que en síntesis también están ocupando gran espacio de la vía pública, que los podrá robar, es muy triste además para él entender que en ocasiones no puede tan siquiera acercarse a un panadería a comprar su almuerzo, un pan de doscientos ($ 200=), pues pensaran que pedirá una limosna o en el peor de los casos robara.
Los habitantes de la calle parecen tener el mismo camino, de donde vienen, quienes eran sus padres? (prostitutas, ladrones, jibaros) tal vez. Hacia donde creen que van y cuando creen que se va a terminar su condición de habitantes de la calle? pues bien, todas las formas de vida en que se le enseñan valores a un chico de 11 años no son iguales, así como tampoco es igual su estatus económico y quizás lo más importante no es igual su pasado familiar; las comparaciones suelen ser muy molestas en ocasiones pero hay peores y con poca suerte de vida que otras tal es el caso de Hover Alberto álzate habitante de la ciudad de armenia y ciudadano de la misma nacido el 8 de agosto de 1979; con 32 años de edad hace un recuento de su vida en condición calle, por el hecho de que a comparación de Jorge no tuvo las mismas oportunidades; ya que, su madre murió debido a un ataque cardiorrespiratorio dejándolo huérfano cuando apenas tenía 10 años. Su madre la única persona en que el guardaba las esperanzas a que fuese una persona de bien y lo criara con valores y no como su familia, rodeado de cleptómanos en todas sus modalidades, pero su vida empezó al revés cuando la única opción de que un familiar se dignara de buena manera a cuidarlo era su primo dado que su hermana se encontraba en la cárcel pagando una sentencia por homicidio su familiar un oportunista, ya que lo único que quería era tener un techo donde poder dormir, lo demás con respecto a él le importaba poco. Abandonando sus estudios y trabajando desde temprana edad Hover conoce el vicio a sus apenas 12 años, que le esperaba a esta criatura en un futuro si ya su cuerpo y su mente se encontraban totalmente perdidos? Por el contrario Jorge Iván a sus apenas 12 años de edad gozaba de total confort y sin preocupaciones laborales ni sociales. Pero según nos aclara las encuestas hechas en la ciudad capitalina dice que las razones para estar en la calle son en orden de importancia las siguientes: problemas familiares (63.5%), malas amistades (17.5%), aburrido con la escuela (15.8%), por condición de desplazamiento (2.2%), perdido de la familia (0.3%) y otras razones (10.2%). Es importante tener en cuenta dos de las razones dadas por los niños y las niñas para frecuentar las calles de sus barrios como son las malas amistades y aburridos con la escuela. Ver gráfico Nº 33.
Gráfico 33
Niños y niñas de 7a 14 años en riesgo de calle en Bogotá D.C., según razones por las cuales están en la calle
Fuente: DANE, IDIPRON. IV Censo sectorial habitantes de calle, Bogotá - Soacha.
Cálculos: Subdirección de Planeación – DABS, 2006.
En Bogotá D.C, (2006) 8.546 personas respondieron la encuesta, de las cuales el 84.6% (7.226) corresponden a hombres y el 15.4% (1.320) a mujeres, de estas personas, el 19.1% (1.629) son menores de 21 años y el 80.9% (6.917) mayores de 22 años; es decir, para las personas que habitan la calle se las encuentra de todas las edades, de distintas partes del país y con distintos propósitos. Según las estadísticas tomadas en Bogotá son más los hombres que habitan la calle que las mujeres pues este es un fenómeno que siempre se ha presentado. En cierto modo la mayor presencia de hombres en la calle, puede obedecer a que en el imaginario colectivo el espacio público representa simbólicamente el territorio de dominación masculina, lo cual se afianza en creencias culturales que le otorgan a este espacio representaciones relacionadas con la fuerza y en algunos casos con la violencia. De otra parte, un grupo de investigadores del DNP y el PNUD, explican que algunas de las razones por las cuales hay menos permanencia en la calle de las niñas, se puede deber a que “… (Estas) están expuestas en menor grado al riesgo del abandono, se muestran tolerantes, más cuidadas por sus madres; al huir de sus casas, optan por la prostitución, antes que deambular (por las) calles, y consiguen más fácilmente trabajo como empleadas domésticas o en labores de este tipo” (DNP – PNUD: 2001, 179). Otra hipótesis que se puede lanzar para que el 15% de niñas y mujeres opten por la calle o terminen viviendo en ella, se debe al uso-abuso de sustancias psicoactivas. Fuente: DANE – IDIPRON, IV Censo Sectorial
Habitantes de la calle. Bogotá y Soacha, 2004.
Cálculos: Subdirección de Planeación, DABS, 2006.
En la vida de Jorge Iván existe una de las tantas formas de poder salir de su adicción al bazuco y por ende alejarse de la situación calle. Poder vivir en un recinto limpio, sin vicios, y represiones sociales, estas últimas las que más lo martirizan. Para poder dejar todas estas situaciones es estar encerrado en un recinto de cuatro paredes o mejor aun en un centro de rehabilitación. Esta situación de ayuda la lograba muchas veces cuando tenía el apoyo económico de su familia, y no esta mas decir que no fue una sola vez, fueron ocho! Las oportunidades que logro estar recluido de la sociedad, presentando indicios de mejoría al segundo mes de estar internado, pero mas allá de esta mejoría siempre venia en su mente algo de trasfondo, una vos malévola pero de confianza esta vos que en lo profundo le decía “vuelve a el ruedo de la calle que allí esta su vida” era el demonio que le quemaba su pensamiento de tranquilidad y pureza. Pues como el bien dice “la única manera que yo siento que pueda salir de ese vicio es como estar en un encierro de cuatro paredes, igualmente entro en un centro de rehabilitación y estoy bien y a los dos meses el demonio me saca y me dice que voy a estar bien y vuelvo y consumo” afirma; Estos pensamientos que lo hacían pensar en una satisfacción de complacencia con tan solo poder imaginarse consumir de nuevo bazuco. Sin embargo, es para él una situación en la que se es débil de razón y lleno de confusiones, pues todo el esfuerzo de las personas que lo rodeaban y con gran esperanzas de que podría mejorar se desvanecen y se van a la borda, amigos, psiquiatras, familia, conocidos cualquier apoyo que estuviese interesado en la buena mejoría de su vida él lo rechazaba.
En un país en donde se ha soportado todo tipo de abusos por parte de gobiernos lastimosamente se les han ido las luces en la buen a administración y al buena fe de las personas, en un país en donde la economía no es nada agradable pero se le hace buena cara y se hace a la idea de que todo está bien pero en realidad todo anda mal. Pues bien, si la situación sigue como viene y la violencia acompañado del desplazamiento no dan un paso atrás, seguiremos viéndonos en la triste realidad de tener que ver como personas pueden habitar y convivir en la calle en condiciones inhumanas de vivencia. Solo es cuestión de esperar que se implementen proyectos locales que saque de la mala imagen de abandono social a las capitales del país. Si existiesen conexiones en base a buenos proyectos de mejo ración a la calidad de vida muy probablemente se puede ver Jorge Iván beneficiado de esta situación. Por su parte debe cada persona que duerme y pertenece al tan misterioso y desgraciado colectivo de “habitantes de la calle” deberá hacer un mínimo esfuerzo para poder salir de las calles donde posiblemente en cualquier ocasión se podrán encontrar la muerte. “Analizando la información por rangos de edad se encuentra que los habitantes de calle que llevan seis años o más, en promedio son mayores de 35 años, mientras que los que llevan menos de tres años, tienen un rango menor de edad. Por ejemplo, entre los habitantes que tienen entre 36 y 45 años, el 25.6% de ellos llevan más de 6 años en la calle, mientras que el 7% lleva menos de un año. Por su parte, el 78% de los habitantes de la calle entre 22 y 26 años llevan menos de 3 años de estar en calle, frente al 15% que respondió llevar más de 6 años en calle”.
Habitantes de Calle y tiempo de permanencia en calle en Bogotá D.C., según menores y mayores de 21 años
Fuente: DANE – IDIPRON, IV Censo Sectorial Habitantes de la calle. Bogotá y Soacha, 2004
Cálculos: Subdirección de Planeación, DABS, 2006.
Inicialmente se hace un trabajo de campo para poder conocer la situación del protagónico de esta crónica. Es decir conocer realmente la situación en la que viven personas que quizás pudieran haberte acompañado en un proceso de tu vida, y después ver sus vidas destruidas es algo que te llena de escalofríos. Pues si bien sabemos es un mundo tan oscuro y lleno de riesgos que con tan solo ver sus rostros y sus rasgos físicos se puede analizar el sufrimiento que por dentro llevan, personas llenas de temores, que lo único que en sus mentes siempre piensan es cuando les llegara la hora de partir a un mundo mucho mejor (otra vida). O más bien salir de ese proceso tan tormentoso y lleno de provocaciones, pensamientos que los llevan nuevamente a la misma situación. En resumidas cuentas se debe iniciar un proceso con las personas de menor edad para poder evitar y hacerle el quite a esta posible situación ya que ellos los más pequeños son los más propensos a ver sus vidas disfrazadas con un costal en la mano reciclando y consumiendo todo tipo de drogas.
Referencias: